MVP no tan mínimos

He detectado un problema en la metodologías ágiles de desarrollo.

Soy un fan de ellas. He llevado el concepto de MVPs (Productos Mínimos Viables), Product Owners (responsables no jerárquicos de los procesos), Sprints (tiempos de desarrollo acelerados) y todo lo que implican (iniciando por el cambio de lenguaje) a áreas corporativas muy distintas a la del desarrollo de software, para lo cual fueron inicialmente concebidas.

El problema de hacer entregables sin esperar perfección es que canjeamos modelos de resultados por calidad.

La cultura corporativa puede verse fuertemente impactada por el exceso de resultados que suponen el cumplimiento de las hipótesis de valor y de escala: ya somos eficientes y efectivos, pero no top quality.

Propongo otra hipótesis adicional: la hipótesis de calidad mínima. Aumentar el nivel de M (Mínimo) en MVP. Subir el nivel de calidad como un objetivo de iteración adicional (se me ocurre que aquí se debería incluirse algo parecido al método MoSCoW).

Lo ágil seguiría siendo efectivo, pero volverán los ojos a la calidad.