12 Ene 2007
El iPhone, un terremoto en la industria celular
El presidente de Apple dejó por fin caer el telón para presentar en público su producto más esperado, el iPhone. Después de meses de especulación, los fanáticos de las tecnologías, y más específicamente de apple saben a ciencia cierta como será y cómo se verá un celular desde la perspectiva apple.
Sin embargo, lo sorprendente es que este teléfono celular —sin haber salido al mercado—, ha tenido un despliegue mediático que envidiaría cualquier político o estrella de Hollywood.
El iPhone, del cual sólo se conocen algunas fotos y que estará en las vitrinas hasta Junio,ya ocupa primeras planas en miles de Blogs y periódicos del mundo obteniendo millones de dólares en publicidad gratuita, y a juzgar por los miles de interesados que han llamado a apple, este producto será un completo éxito.
Exceptuando quizá el reciente lanzamiento de la consola PlayStation3 en Estados Unidos, causante de asonadas, heridos y hasta muertos, no habíamos visto tanta conmoción para un producto tan sencillo y común en el mercado, al fin de cuentas, de celulares con reproductor MP3 está plagado el mercado.
¿Cuál es entonces el meollo del asunto?
Como todos sabemos, no se trata de un celular cualquiera, sino del integrante más aventajado de la famosa familia de los iPod, un reproductor con una brillante carrera reciente, millones de unidades vendidas en el mundo, este aparato prácticamente devolvió la otrora desgastada manzanita a la mente y las vidas de las personas y devolvió a la empresa a las grandes ligas de la tecnología.
El iPhone es, ni más ni menos, que la tan sonada evolución de un producto que prácticamente reinventó una industria y creó su propio océano azul.
Cuando apenas nacía el mp3 en el mundo, en una jugada visionaria, Jobs enfocó todas sus energías a crear un producto sencillo y poderoso, que calara profundamente en la retina de miles de personas, creando un reproductor poderoso e impactante que le agradó a la gente y se colocó a kilómetros de sus competidores.
Tal fue el éxito que ahora sus competidores lo imitan tratando de morderle un poco de su mercado, incluso Microsoft lanzó el adusto Zune, también llamado el anti-iPod o iPod-Killer. Ahora también miles de páginas analizan el éxito del íPod, y desde esta misma perspectiva Steve Jobs sorprende a muchos con su nuevo juguete, un celular que parece un iPod, o viceversa, con pantalla táctil, acceso a Internet, mensajería instantánea, cámara fotografica de 2MP y muchas otras características.
Cuando el iPhone salga al mercado y sepamos su precio real en nuestras tiendas (que según Jobs será de $499 por la versión de 4 Gigas, y $599 por la de 8 Gigas) , sin duda se sentirán réplicas de este temblor de tierra, El Director de Apple, Steve Jobs, dijo que podría vender 10 millones de iPhones en 2008. Esto sería aproximadamente el 1 por ciento del número de teléfonos móviles pronosticados para ser vendidos ese año.
Quizá este celular se convierta en un verdadero dolor de cabeza para los grandes fabricantes mundiales (Nokia, Motorola, Samsung, Sony Ericsson, LG, Siemens, etc), quienes desde esta semana estarán sin duda revolcando sus departamentos de diseño y producción para crear sus propias versiones “iPhone-killer”.
Ya algunos expertos especulan que quizá en la industria de los celulares se repita (o al menos se acerque) a lo que pasó en la de reproductores de música, donde el iPod se lleva más de la mitad del mercado.
Apple no la tendrá fácil, pero, amanecerá y veremos.
12 Ene 2007
¿Será el iPhone el nuevo paradigma del celular?
Si hace algunos días al regresar de vacaciones me hubieran dicho que la versión del huracán katrina del mundo del mercadeo era “un celular que reproduce música”, probablemente lo habría tomado como un mal chiste.
Y es que a propósito del sonado lanzamiento del iPhone, del que ya hablamos en nuestro post: El iPhone, un terremoto en la industria celular, es mucho lo que se ha dicho y se puede leer desde muchas perspectivas, una de ellas, bien sustanciosa por cierto, es la del marketing.
La gente empieza a especular, cuánto pagaría por él, será bueno lanzar un producto 6 meses antes de su salida al mercado, vendrán versiones más económicas, algo así como el iPhone nano, o Shuffle… se le toma el pulso al mercado por unos días, pero sobretodo, apple da buena cuenta de su estrategia de expectativa que empezó hace unos meses, cuando Jobs comenzó a decir que se traía algo grande entre manos.
Parejamente, los expertos de nuestro campo nos hemos venimos preguntado ¿Cuál es su secreto para que Steve Jobs se haya convertido en el Rey Midas? Todo lo que toca parece convertirlo en oro, sino, basta mirar las cifras de ventas de su compañía en los últimos años.
Cómo llegó la marca iPod a ser un concepto
En el mundo del Marketing no es un secreto que es más fácil vender conceptos que marcas o productos. Recordamos el concepto de libertad y fuerza del Hombre Marlboro, o el concepto de rebeldía que nos venden junto con las motos Harley Davison.
El iPod, parejamente, a riesgo de parecer poético, es la consecución de un estilo de vida, o mejor, de una sencilla manera de pensar la vida (think, como el lema de apple), es un objeto de diseño minimalista y cuidado, que casi se convierte en un accesorio de moda y un símbolo de modernidad.
Esta particular manera pensar sus productos es el principal activo de apple. Desde hace unos meses cuando el Wall Street Journal especulaba que el próximo lanzamiento de “Mac” sería un teléfono celular, sabíamos que de ser cierto, apple nos sorprendería, y así sucedió.
Visto objetivamente, el iPhone no es una maravilla tecnológica venida de otro mundo, se trata tan sólo de un celular cuyas funciones y características ya han sido incorporadas por otros fabricantes.
LG por ejemplo, presentó en enero su modelo LG KE850, una versión sospechosamente parecida al iPhone de apple, tiene un diseño similar y también cuenta con pantalla táctil.
No obstante, bien sabemos que nuestro mundo es mucho más sutil y divertido que eso y los ‘consumidores’ (para llamarlos de alguna manera) no pueden ser reducidos a estas miradas tan simples, despojadas de toda clase de sentimientos.
Mucho más que un teléfono
De hecho, al mirar el clásico iPod de una manera reduccionista (olvidando sus miles de accesorios) veremos que se trata de un disco duro con un par de audífonos, y como sabemos, de estos juguetes está plagado el mercado.
Y sin embargo, este sencillo aparatito es el dueño del mercado y parece tener un ‘ángel’ o una magia que dará para muchos años más. El iPod ahora evolucionado a iPhone es mucho más que un teléfono.
El iPhone remplaza los miles de boloncitos habituales en un celular (tiene sólo un botón) por unos controles táctiles que aparecen en pantalla y se reconfiguran según la función que estamos usando.
De esta manera se aplica al mundo celular (aunque no por primera vez) la tecnología de pantalla sensible al tacto tan extendida en otros campos, evitando los pequeños punteros plásticos que se nos pierden o escurren de las manos, los dedos; como dice Jobs, los dedos son nuestros mejores lápices, y siempre los tendremos “a mano”.
La gran lección de Jobs puede ser tratar de hacer productos que se adapten a las personas, y no vender productos a los que tengamos que adaptarnos y aprenderlos a través de pesados manuales.
Apple se ha preocupado por crear productos intuitivos, fáciles de aprender y manejar para todos, incluso para inexpertos en tecnología. Cuántas veces hemos tratado de hacer y vender cosas que difícilmente podemos manejar o presentar.
El iPod y ahora su aventajado alumno, el iPhone, parecen confirmar la máxima sinérgica: “El todo es superior a sus partes”, no se trata de vender unos cuantos chips en una cajita plástica, sino de todo el ‘aura’ que rodea un producto, lo que lo lleva a convertirse en un Símbolo, en un concepto, como lo es el iPod para esta generación.