Mercurio

«Es mercurio inhalado,
detonando terminales nerviosas y aterradas,
destapando sinapsis ya pavimentadas.

Es una bola termosensible deshaciéndose,
reformándose y rearmándose
una y otra vez.

Es Hermes desbordado,
borracho, confundiendo todo.
Es Hermes El Ladrón,
de mi tiempo y de mi hambre,
el mercurio retrógrado que replantea-reconstruye-y-revisa
lo planteado-construído-y-revisado,
una y otra vez.

Pero sobre todo
es el mercurio con perihelio trastocado,
con el fantasma de Vulcano
–que sí existe, que Einstein reviva
y vuelva a morir por desvirtuarlo–
torciendo su centro hacia la incandescencia.

Son trescientos sesenta grados
de calor y de inclinación
calentándose a cero y girando sobre sí,
una y otra vez.
Una y otra vez.»

 


Notas: 

  • En un texto más amplio en el que trabajé (y abandoné), esta es la respuesta de un hombre a su psicoanalista a la pregunta “¿Cómo describiría a la mujer que lo tiene en ese estado de ansiedad?”
  • Mercurio es todo: droga, medida, dios pagano, personaje zodiacal, astro, temperatura.
  • Curiosidad que no sé para qué sirva: la existencia de Vulcano y el perihelio trastocado de Mercurio están fundamentados en una anomalía astronómica que se resolvió con la Teoría de la Relatividad. Es una historia muy interesante. Google it!