Antípodas

Lo opuesto al calor no es (termodinámicamente hablando) el frío. El frío se define ahí como la falta de calor, la ausencia de movimiento.

Con esta noción concluimos que lo opuesto al amor no es el odio: es la indiferencia.

Schopenhauer ubica al nacimiento y a la muerte como los extremos, pero dada su naturaleza lineal en el tiempo (solo puede ir en una vía -del nacimiento a la muerte, y no al revés), busca una compensación.

Y la encuentra en ese mismo lugar…

El amor es la compensación de la muerte; su correlativo esencial.

ARTHUR SCHOPENHAUER. El amor, las mujeres y la muerte (1819)

En los extremos (calor/quietud, nacimiento/muerte) hay cosas moviéndose: átomos y vida, según los ejemplos de arriba.

En el medio de todos, y como compensación, el amor.